martes, 22 de enero de 2008

desiertos (1)

y te quedás hablando pavadas / ¿para qué querés quedar en la memoria de alguien? / no posee densidad esa condición / apenas la textura de la voz que nombra o el aroma imperceptible del recuerdo / la muerte y punto / pero cuando hablo de desiertos no hablo de la muerte / sino de la fruta que ya madura cae sobre la tierra infértil y aunque se pudra / de la palabra que no alcanza para significar ni siquiera un ataque de asma / ni un estertor / de la palabra cuando es inútil / totalmente inútil y laxa y lavada / de la palabra que no alcanza a proyectarse sobre las paredes mientras camina / a eso va / y te quedás hablando pavadas / y no es la muerte / pero igual que esta mañana, un desierto

1 comentario:

Unknown dijo...

muy bueno... ¿por qué será que nos enseñan a querer quedarnos en la memoria de alguien?